domingo, 21 de junio de 2015

BARMITZVAH DE MOSHE


Moshe condecorado por Achim L,echaim

Shajarit en el Kotel
Cindy en el Kotel
Shajarit en el Kotel
Tefilim en Safed

Shajarit en Safed

Alia en el Kotel

Minja en Tumba de Rachel

Primera vez los tefilim en Safed

Tefilim en Safed

Moshe y Rav. Shpalter
Safed

Tienda de Abraham

Mar Muerto

Tienda de Abraham

Max Shofar

Cindy y Jaya
Max Shofar
Yerushalaim

Max en Kotel

Yerushalaim
Mar Muerto

Mar Muerto

Safed
Max en Pantry Packers
kfar yeladim

Moshe en Pantry Packers
Max


Querido moshe, ante todo quiero decirte que es para tus abuelos y padres una gran alegría el que hoy te coloques por primera vez los tefilim, reces la parasha y conduzcas todo la ceremonia religiosa de este día. Es para tus abuelos una felicidad y agradecimiento al Hashem el poder estar presente en esta ocasión, nuestros sabios han afirmado que es un gran logro para un judío el poder ver realizado la barmitzvah de su nieto, porque allí está aseverando la continuidad en tercera generación de nuestro judaísmo. Tus padres han querido que estemos toda la familia en Yerushalayim, el lugar más santo para nuestro pueblo, y tú , hijo del mismo, ejemplarizas con esta celebración la mitzvah de todo hombre judío al cumplir trece años. Se nos ha otorgado un gran honor el poder acompañarte,  quedará en la memoria de tus descendientes esta fecha que junto a tus queridos padres, hermanos y familia toda hayas pronunciado tu fe en los preceptos de nuestra Torá. Sea esta celebración la primera de las que con el favor de Hashem, te veamos también bajo la jupá y más allá en britmilá de tu descendencia
Esta jornada aquí, no concluye hoy, será recordada por todos los presentes de cuya presencia colaboraron con todos los actos de jesed que forma parte del precepto de bondad. Nuestros sabios han dicho que no debemos concluir ninguna festividad sin que conlleve la tzedaka con el prójimo, a consciencia de que en tu vida siempre podrás tener el zejut de dar de ti. Así como recibes hoy las letras de la Torá, en esa misma forma tendrás la responsabilidad de entregar a otros mediante el jesed.
La extraordinaria fortuna de poder conducir tu primera plegaria junto al Kotel, liberada después de 2.000 años y estar delante de él, cuando nuestros abuelos y antepasados soñaron que algún día podríamos tocar sus piedras.
No termino estas breves palabras sin antes agradecer el esfuerzo en la organización a tus padres, rabinos, familia y amigos que han venido a acompañarnos, y al Hashem por permitir que la ceremonia se lleve a efecto en paz, alegría y lleno de kedushá.
Brindemos todos con un Lejaim y de cuya copa brote cada gota de sabiduría que representa a su vez la eternidad de nuestro pueblo en una Yerushalaim unificada y de nuestra presencia una vez más el amor a nuestra tierra Eretz Israel.